Tiempo de lectura: 5 minutos.
La lectura rápida es una técnica que nos permite leer más rápido sin sacrificar la comprensión. Es una habilidad valiosa para tener ya que nos permite leer más en menos tiempo. Si estás interesado en mejorar tu lectura rápida, aquí hay algunos consejos que pueden ayudarte:
1. Identifica tu velocidad de lectura actual
Antes de empezar a trabajar en tu lectura rápida, es importante saber cuál es tu velocidad de lectura actual. Puedes usar esta herramienta que te indica cuentas palabras lees por minuto, también lo puedes hacer leyendo un libro y contando el número de palabras que lees por minuto. Conocer tu velocidad de lectura actual te ayudará a establecer metas realistas y a medir tus progresos.
2. Saltear palabras no esenciales
Algunas palabras no son necesarias para comprender el texto. Estas palabras incluyen artículos (como "el", "la", "un"), conjunciones (como "y", "pero", "o") y preposiciones (como "a", "en", "con"). Saltear estas palabras puede ayudarnos a leer más rápido sin sacrificar la comprensión.
3. Usar el dedo o un marcador
Al seguir el texto con el dedo o con un marcador, podemos mantener nuestra atención en el texto y evitar distracciones.
4. Leer en bloques
En lugar de leer palabra por palabra, trata de leer en bloques de palabras. Para lograr esto te recomendamos trabajar el reconocimiento de palabras con la ayuda de un Taquistoscopio, aquí puedes descargar uno con las plantillas para usarlo.
5. Hacer pausas de vez en cuando
Hacer pausas de vez en cuando puede ayudarnos a asimilar mejor lo que hemos leído y a mantener nuestra atención en el texto.
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6. Utilizar técnicas de visualización
La visualización es una técnica que consiste en crear imágenes mentales de lo que estamos leyendo. Al hacer esto, podemos comprender mejor el texto y retener más información. Algunas personas encuentran que la visualización les ayuda a aumentar su velocidad de lectura.
7. Subrayar y resumir
Al subrayar y resumir lo que estamos leyendo, podemos aislar lo más importante y ayudar a nuestra mente a procesar la información de manera más eficiente.
8. Tener un propósito
Si tenemos un propósito claro al leer, podemos enfocarnos mejor en lo que estamos leyendo y evitar distracciones. Asegúrate de saber por qué estás leyendo algo y qué es lo que esperas obtener de ello antes de empezar.
9. Relajarse
A veces, nuestra velocidad de lectura se ve afectada por nuestro estado de ánimo o por el nivel de estrés que estemos sintiendo. Trata de relajarte antes de leer y evita distracciones para poder concentrarte mejor.
10. Practicar
Como con cualquier habilidad, la práctica es clave para mejorar la lectura rápida. Puedes practicar leyendo textos específicos o utilizar ejercicios en línea para mejorar tu lectura rápida.
“La lectura es una forma de pensamiento, una forma de crecimiento y una forma de vida.”